Quisiera ser un peón en tu tablero de ajedrez
un guijarro en tu camino,
un grano de tu cosecha
y una gota de agua en tu marisma.
Quisiera ser el lucero de tu atardecer
un puñadito de arena de tu playa,
el cielo de tu esperanza
y la esperanza de tu cielo.
Quisiera ser tu sueño del otoño
el calor de tu invierno,
la luz de tu camino
y el farol de tu tiniebla.
Quisiera ser la estrella que alumbra tus noches
la esperanza de tu ilusión perdida,
pero sobre todo quiero ser...
... la cuna que mece tu alma.
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1 comentario:
Mira por donde blogueando llegué a tu blog, leí tu poema y te reconocí. Recibe un saludo y me alegra haberte encontrado por la red.
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